Los valores en las empresas familiares
“Los valores son como el viento, no se ven, pero se sienten”
José Luís Simões
Una de las características diferenciadoras de las empresas familiares es el hecho de que sus fundadores suelen trasladar los valores, principios y normas de conducta que regulan su estructura familiar hacia la empresa, dando forma a una cultura organizacional bajo la cual se reconocen y se viven dichos valores. Como muestra de lo anterior, la firma ATREVIA y el IESE Business School (2016) en su estudio “Los valores y la comunicación en la Empresa Familiar”, encontraron que el 67,5% de los encuestados afirman que “en sus familias existen unos valores identificados y compartidos por todos los miembros” y casi el 90% de ellos “asegura que los valores familiares están reflejados en los valores corporativos de sus empresas”.
Al estar presente una cultura organizacional sólida, en la que la existencia de los principios y valores familiares está garantizada en la mayoría de los casos desde la familia propietaria, se aumentan las posibilidades de perdurar y trascender en el tiempo, constituyéndose como una ventaja frente a las estructuras empresariales que no poseen un carácter familiar. No obstante, esto también representa dos grandes retos: en primer lugar, los líderes de las empresas familiares deberán tener la capacidad de encontrar un equilibrio y generar armonía entre los valores como EMPRESA enfocados a rentabilizar su actividad económica, con los valores propios de la FAMILIA, donde lo primordial es el cuidado y desarrollo de la siguiente generación.
Dichas particularidades hacen que la gestión y desarrollo de estas empresas sea diferente, y que en esta medida el éxito de las empresas familiares y su trascendencia en el tiempo de manera competitiva en el mercado que se desempeña dependan de la capacidad de sus líderes para lograr un equilibrio entre los valores empresariales y familiares. Para observar en detalle las diferentes orientaciones de valor entre estas dos instituciones sociales, se presenta una tabla del artículo “Sello de familia: Cultura y Gobierno Corporativo en la empresa familiar latinoamericana” (Lansberg & Gersick, 2016).
«Si los valores son la esencia de las empresas familiares, la transmisión de estos valores es el principal desafío al que se enfrentan las familias empresarias”
Josep Tàpies
En segundo lugar, es clave que los valores que se viven en la empresa familiar sean trabajados y transmitidos a las siguientes generaciones de una manera estructurada y consciente; pues de lo contrario, los futuros propietarios de la empresa no permeados por dichos valores podrían tomar decisiones que posiblemente afecten las relaciones de la empresa con sus grupos de interés (empleados, bancos, proveedores, juntas directivas y demás), impactando negativamente su cultura organizacional y la viabilidad de la misma en el largo plazo.
En este sentido, será de gran importancia que quienes lideren y/o acompañen la gestión de este tipo de estructuras organizacionales, actuando bajo el convencimiento de garantizar la sostenibilidad y la continuidad en el tiempo, generen procesos de reconocimiento de sus propios valores desde lo empresarial y familiar, busquen su equilibrio, apropiación y transmisión a través de su estructura organizacional; y, sobre todo, se enfoquen en la generación de estrategias claras para permear y empoderar a las futuras generaciones en pro del éxito futuro de su empresa familiar.
Referencias
- ATREVIA & IESE Business School (2016). Los valores y la comunicación en la Empresa Familiar.
- Lansberg, I. & Gersick, K.E. (2016. Sello de familia: Cultura y gobierno corporativo en la empresa familiar latinoamericana. Harvard Business Review América Latina.
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